Vinos para el menú navideño

Se acaba el año y, como es tradición, despedimos 2011 y damos la bienvenida al año nuevo con una cena especial. Una noche repleta de platos tradicionales que se repiten año tras año. El menú navideño suele ser largo y más suculento de lo habitual, así que en cuestión de vinos el tema puede complicarse a la hora de seleccionar los vinos y su maridaje. Aunque siempre se puede optar por la línea recta, comprar el vino que más nos guste y disfrutarlo, es obvio. Pero los que quieran jugar con combinaciones de vino y plato, las posibilidades con las que se encuentra puede ser muy sugerentes.

Estas son algunas pautas para el juego, porque sobre gusto ya sabemos que no hay nada escrito.

Cócteles

Empezar con un cóctel de vino como aperitivo puede sorprender. Propongo dos, muy fáciles de hacer y con ingredientes que seguro que tenemos en casa.

Bellini: en una copa de cava echar 1/2 zumo de melocotón y 2/3 cava brut. Si solo tienes zumo de naranja, sírvelo en proporción 2 a 1 con el cava y tendrás un Buck´s Fizz.

Kir: en copa de vino servir un poco de casis y el resto vino blanco, al gusto de cada uno.

mariscos
Marisco, ¡qué no falte!

Mariscos

Probablemente, lo no nunca falta en la mesa. El juego de los tipos de mariscos con distintos tipos de vino es, al menos, muy agradable al paladar. Albariño de Rías Baixas para los crustáceos es todo un clásico. El juego de los finos y manzanillas para gambas, langostinos etc. es otra alternativa. El cava y otras variedades blancas pueden dar mucho juego.

Pescados
Pescados y vinos dan mucho juego

Pescados

No solo del blanco vive el pescado. Tintos de medio cuerpo con bonito, bacalao…acompañan muy bien. Blancos fermentados en barrica para pescados con salsas o ahumados es una buena combinación. Tipo de pescado y elaboración darán más o menos juego para armonizarlo con diferentes vinos.

Aves rellenas

Capón, pularda, pavo etc con su relleno más o menos variada, y contundente. Creo que con esta opción el juego de los vinos tintos aromáticos y no con demasiado cuerpo ni muy potentes podría ser una buena opción. Variedades como la Pinot Noir, Merlot, Tempranillo, Mencía…sería una alternativa.

carnes
Carne y vinos tintos

Carnes

Lechazo, cordero…solo con escribirlo ya estoy pensando en un tinto sabroso, potente y armónico. Seguro que cada uno tiene su vino favorito para este tipo de plato.

Postres

Si llegamos al postre, las macedonias, hojaldres de frutas etc son muy navideños. Y si nos apetece cambiar de vino, un moscatel fresco o un vendimia tardía sería un buen maridaje. Para los más golosos, quizás les apetezca un Pedro Ximénez con orejones, frutos secos…otro de los sabores imprescindibles de la Navidad. Personalmente, me gusta un buen Oporto para acabar la cena.

Lo dicho, el vino como un juego de sensaciones. Y que cada uno se quede con lo que más le guste.

¡FELIZ 2012!

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